Recre B-Sanluqueño: El fútbol le debía una al filial

El Recre B por fin pudo sacar tajada de los 'malditos' últimos minutos e igualó a dos un partido que tenía perdido. Álvaro González fue el gran protagonista por parte albiazul, con un doblete.

Nuevo empate para el Recreativo de Huelva B, pero este con mejor sabor de boca que los últimos que ha cosechado con Quevedo y Raúl Molina en el banquillo. Lo que el fútbol le privó al filial en innumerables ocasiones, con puntos que se esfumaron en los últimos minutos por autentica mala suerte, en esta ocasión le dio un empate que sabe a mucho.. Sobre todo, tal y como se había puesto el partido para los recreativistas.
Y es que durante gran parte del partido, el Recre B fue un juguete en manos de un Sanluqueño que tampoco mereció tal premio. Las numerosas e importantes bajas del equipo albiazul le restaron capacidad competitiva, que sumado a la desastrosa actuación del colegiado cordobés Fernández Muñoz, parecieron hundir a un equipo que se veía impotente ante la experiencia de su rival.
Pero el fútbol, caprichoso como ninguno, premió el empuje albiazul de los últimos minutos, en el que los hombres de Quevedo dieron todo lo que tuvieran, a pesar de carecían de sus dos hombres más en forma, como eran Miguelito y Kike. Liderados por un gran Álvaro González, la casta de los recreativistas se vio recompensada por los dos goles del mediocentro onubense, igualándole el marcador a un equipo que estrenaba nuevo técnico y que por lo tanto llegaba a Huelva con una motivación extra.
El filial saltó con el once esperado, dentro de las circunstancias que rodeaban al equipo, lastrado por tantas bajas. Así, Ángel estuvo en la portería, con una línea defensiva donde Aranda sustituyó a Ezequiel en el lateral izquierdo y acompaño en la zaga a Lulu, Pablo Oliveira y Vega. En el centro del campo Bonaque y Álvaro González llevaron la manija del equipo, apoyado por una línea de tres formada por Cruz, Álex Zambrano y Borja, futbolista del juvenil. Arriba, en su debut oficial con el filial, el delantero colombiano Cristian Mejía.
Los albiazules empezaron el partido muy dubitativos, como el tiempo, que obligó a disputar en encuentro en uno de los campos anexos de césped artificial. Quizás las bajas y el que algunos futbolistas entraran por primera vez en el equipo, hizo que este comenzara temeroso el encuentro, lo que aprovechó su rival, necesitado de mostrarse ante su nuevo entrenador.
Así, en el minuto cuatro, una buena combinación de los hombres de vanguardia del Atlético Sanluqueño, permitió a Juanmi rematar a gol un buen servicio desde la derecha.

Este gol dejó tocado durante mucho tiempo al filial, que empezaron a caer en la trampa que le propuso el equipo que tenían enfrente, ya que amontonaron muchos futbolistas en el centro del campo y obligaron a los de Quevedo sacar el balón con los centrales y abusando de balones en largo, lo que era muy fácil de despejar para los defensas del Sanluqueño.
El Recre B, que intentó pisar el área rival con alguna llegada de Borja o Álvaro, vio como de nuevo encajaba un duro golpe, que a punto estuvo de mandarlo a la lona. Así, en el veintitrés, lo que parecía una jugada intrascendente del rival, acabó con un disparo lejano que tras pasar sin tocar en ningún futbolista del filial, acabó en los pies de Juanmi. Pero lejos de señalar fuera de juego el colegiado o sus asistentes, estos dieron por válida la posición del delantero rival, que no desaprovechó la oportunidad para hacer el segundo de su equipo en claro fuera de juego.
Esta acción incendió a los aficionados asistentes, que la tomaron durante todo el partido con el trio arbitral. De ahí al final de la primera parte poco más ocurrió, con un Recre B desconectado y un Sanluqueño que se veía ganador con el cero a dos que registraba el marcador.
Para cambiar esta situación, Quevedo movió el banquillo, dando entrada al juvenil Pablo por Aranda, pasando a jugar el equipo con una línea de tres en defensa. Zafarrancho total, con muchos riesgos a que el rival matara el partido a la contra, pero no quedaba otra cosa. Más tarde entró Papú, más madera procedente del juvenil.
Con un juego poco brillante, pero no menos que su rival, el filial tiró de orgullo y pasó a llevar el dominio del partido y a encerrar a su rival, el cual pensaba que el partido no se le escaparía. Pero el Recre B, liderados por un gran Álvaro, encontró premio a su empuje con el gol del mediocentro onubense, que se aprovechó de un balón muerto, tras centro de Borja. El uno a dos le metió el miedo en el cuerpo al Sanluqueño, que no supo reaccionar en estos últimos minutos.
Tirando de épica, cuando la lluvia empezaba a caer con fuerza en la capital onubense, el filial recreativista igualó el partido desde el punto de penalti. Todo vino precedido de una melé en el área, en el que pasó de todo. El colegiado no lo dudó y señaló penalti para los recreativistas, en el que Álvaro no falló y puso el empate a dos ante el júbilo de los presentes.
Con el punto, los albiazules siguen décimos con veinticuatro puntos, con una ventaja de siete puntos con el descenso y a la espera de que concluya la jornada.

Ficha técnica:
Alineación del Recre B: Ángel; Lulu, Pablo Oliveira, Álvaro Vega, Aranda; Bonaque, Álvaro González; Cruz, Álex Zambrano, Borja; y Cristian.
También jugaron: Pablo y Papú.
Goles: 0-1, minuto 4 – Juanmi. 0-2, minuto 23 – Juanmi. 1-2, minuto 83 – Álvaro. 2-2, minuto 90 – Álvaro.
Árbitro: Fernández Muñoz (Comité cordobés).
Incidencias: Partido correspondiente a la decimonovena jornada de Liga del grupo X de Tercera División, disputado en Ciudad Deportiva ante cien aficionados. El partido se disputó en uno de los campos anexos de césped artificial. Al finalizar el encuentro, hubo una tangana entre técnicos del filial y jugadores del Sanluqueño.

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